La Mampara del baño

No se si les ha pasado que cuando visitas una casa, y te enseñan todas las estancias; el baño es un punto de referencia importante. Entras. Observas lo bien decorado que está. Piensas en el tuyo y lo comparas consciente o inconscientemente— generalmente porque el tuyo lo tienes más "funcional". Los estantes, todo tan bien colocado a la vista; las cajoneras, con unas toallitas muy monas que parecen de un hotel de cinco estrellas, con sus bandejitas acordes al resto de la decoración. Y cuando giras la cabeza hacia la ducha, es entonces cuando se te abren los ojos como platos ante una mampara transparente. Impoluta. Sin asomo de gota de agua reseca; como si fuera un espejo en el que te ves al trasluz. ¡Y es que te ves! Piensas —¡seguro que este baño no lo usan! Siguen enseñándote la casa y tú esperando a ver el segundo cuarto de baño. Ese que seguro tendrá una mampara opaca y con relieves simulando gotas de agua, de la que puedes salir corriendo en las mañanas que se apu...